Me gustó que el alojamiento estuviera ubicado en un entorno tranquilo y rodeado de hermosos paisajes. Además, el propietario fue muy amable y acogedor, explicándonos diferentes actividades que podíamos hacer en la zona. disfruté de la comida del comedor, que estaba deliciosa y hecha en casa.

No me gustó tanto que en la habitación privada en la que nos alojamos, uno de los colchones tenía un cubrecolchón de plástico que resultaba un poco incómodo. Sin embargo, las almohadas y el colchón eran muy cómodos.

Paisaje maravilloso

Lugar tranquilo. Personal amable y acogedor.- Habitaciones cómodas.- Instalaciones completas.- Comidas caseras deliciosas.- Ambiente familiar.- Encanto del pueblo

El personal del alojamiento es muy acogedor y te hace sentir como en casa. La habitación es cómoda y las instalaciones están completas, incluyendo una amplia biblioteca/sala de estar. Las comidas y cenas caseras que se ofrecen en el hotel son deliciosas y se hacen con mucho cuidado.

Nos encantó la tranquilidad del hotel y su limpieza impecable. Las vistas desde nuestra habitación eran realmente bonitas. Además, las hamburguesas de la cena eran de las mejores que hemos probado. Pero lo que más destacamos es el trato del personal, especialmente de Lalo, siempre dispuesto a ayudar y asegurarse de que no nos faltara nada. Agradecemos especialmente que se levantara temprano para prepararnos un delicioso desayuno antes de nuestra salida temprana. La relación calidad-precio también es excelente. Recomendamos este lugar al 100%.

Nada de nada.

Trato excepcional del personal, recomendaciones para visitar, bar y restaurante excelentes, comida deliciosa adaptada a intolerancias alimenticias, ambiente encantador en el pueblo.

De verdad no hay nada que no me haya gustado.

El albergue Las Huellas de Cameros es muy económico y agradable. Está ubicado en uno de los pueblos más bellos de La Rioja y el edificio en sí es una joya del siglo XIX. El propietario es muy cordial y estuvo dispuesto a esperar nuestra llegada hasta tarde en la noche. El desayuno, por un precio simbólico, es ideal para comenzar el día. hay un buen servicio de WiFi y las camas son muy cómodas. Nos sentimos realmente bien durante nuestra estancia y estamos seguros de que volveremos en el futuro.

Honestamente puedo decir que no había nada que no me gustara. 😊

Desde el momento en que llegué, me sentí como en casa. La habitación estaba bellamente decorada y muy limpia. Además, tenía todo lo necesario para una estancia confortable. Me encantó la ubicación del albergue en el hermoso cañón del río Leza, con tantas rutas de senderismo y pueblos encantadores para explorar en los alrededores. El propietario, Lalo, fue extremadamente amable y servicial, brindándome excelentes consejos sobre qué hacer y ver en la zona. El desayuno era delicioso y ofrecía una gran variedad de opciones. En general, mi tiempo en Las Huellas de Cameros superó todas mis expectativas.

Si tuviera que mencionar algo negativo, diría que pasé un poco de frío en la habitación, especialmente por las mañanas cuando la calefacción no estaba encendida. encontré las camas un poco pequeñas y las mantas ajustadas, lo que hizo que me destapara durante la noche.

Pasamos dos noches en Las Huellas de Cameros Albergue y disfrutamos muchísimo. Lalo, el encargado del alojamiento, fue muy amable y atento, proporcionándonos toda la información que necesitábamos sobre la zona. Las rutas son realmente especiales y el entorno es espectacular. Además, quería destacar la amabilidad de Noelia y Jara, las chicas del comedor, quienes nos hicieron sentir como en casa. La cena vegetariana fue deliciosa y a un precio muy bueno. Sin duda, volveríamos a repetir esta experiencia.

Sin problemas 😊.

El personal muy amable. Ambiente tranquilo y relajante.Desayuno variado y buen precio.Buena ubicación para hacer rutas.

Todo estuvo bien.

En este lugar, me sentí como en casa desde el momento en que llegué. El personal fue amable y me hizo sentir muy bienvenido. La habitación era cómoda y las instalaciones del hotel eran muy completas, incluyendo una biblioteca/sala de estar muy amplia. Además, las comidas y cenas ofrecidas en el comedor eran deliciosas y se notaba que estaban preparadas con mucho cuidado y cariño. Más aún, el desayuno ofrecía una variada selección de opciones, tanto saludables como indulgentes. Además, la limpieza en todo el hotel era impecable.

Nada, todo fue genial.

He tenido una experiencia maravillosa en este albergue! El ambiente es tranquilo y acogedor, perfecto para disfrutar de unas vacaciones relajantes. El personal es amable y te hace sentir como en casa. El alojamiento está decorado con mucho detalle y transmite una energía positiva. Además, el entorno es precioso, con vistas impresionantes y muchas actividades al aire libre para disfrutar. La habitación en la que me alojé era muy cómoda y las instalaciones estaban completas. tuve la oportunidad de probar las deliciosas comidas caseras ofrecidas en el alojamiento. No puedo esperar para volver pronto.

Situado en un bonito pueblo junto al río Leza. Trato amable y simpático del personal. Opciones para intolerancias alimentarias. Habitación cómoda y cálida. Ayuda y atención excelente por parte de los dueños.

La amabilidad del personal y su trato cercano hicieron que me sintiera como en casa. La limpieza tanto en las habitaciones como en las áreas comunes era impecable. Además, las instalaciones del hotel eran fantásticas y tenían todo lo que necesitaba. El desayuno era delicioso y me dieron muchas opciones para elegir. También me gustó mucho la ubicación del hotel, ya que estaba en medio de un entorno natural impresionante.

No hay nada que no me haya gustado.

La experiencia en Las Huellas de Cameros Albergue fue simplemente encantadora. Desde la amabilidad de los dueños hasta el encanto del edificio, esta fue definitivamente una elección acertada. El albergue está ubicado en un antiguo hospital construido en 1775, lo que le confiere un aire histórico y único. El interior es espectacular, con una hermosa escalera iluminada por una lucera en la parte superior. Las habitaciones son variadas en términos de precios y comodidades, y la decoración está muy bien cuidada hasta el último detalle. Además, cuentan con una cocina comedor donde los huéspedes pueden preparar sus comidas y disfrutar de un generoso desayuno casero preparado por los propios dueños. La atención y el servicio recibidos fueron inmejorables, lo que hizo que nuestra estadía fuera aún más especial.

Sin problemas 😊

Trato excepcional del personal, recomendaciones para visitar, bar y restaurante excelentes, comida deliciosa adaptada a intolerancias alimenticias.

De verdad no hay nada que no me haya gustado.